(Populus) El álamo pertenece a la familia de las salicáceas. Su vida es corta pero crece con gran rapidez, alcanzando hasta 20 metros de altura y medio metro de diámetro en su tronco. Habita preferentemente en las zonas templadas del hemisferio norte.
Las flores penden de las ramas formando densos racimos.
Su madera es blanda y se emplea en la confección de envases, cajas y fósforos y también como fuente de materia prima para la industria papelera.
El rápido crecimiento de todos estos árboles hizo que el hombre se preocupara de su selección y cultivo. En la actualidad se explotan de forma intensa y se obtienen mucha variedades por cruzamiento de las especies naturales.
El álamo temblón (Populus tremula) es la especie de álamo más adaptada al frío. Vive en las regiones meridionales de Europa y Norteamérica, en los lugares montañosos más frescos. Junto con el abedul, el álamo temblón es uno de los árboles que primero puebla los bosques devastados por incendios. Debido a la especial inserción de la hoja sobre el pecíolo, al menor soplo de viento todo el follaje del árbol se estremece, lo que ha dado origen al nombre de la especie. Sus hojas son acorazonadas, tienen una coloración verde oscura en la cara superior y clara en la inferior y adoptan una disposición alterna a lo largo del tallo. La corteza es de superficie uniforme y color amarillento o blanquecino con manchas oscuras. Con el tiempo los troncos se vuelven ásperos y negruzcos.
Existen otras especies de álamos, más comúnmente llamados chopos. Habitan en las llanuras y no huyen del calor, aunque sólo crecen en lugares donde la humedad está asegurada todo el año, como riberas de ríos.
- Una de estas especies es el chopo blanco (Populus alba), de hojas lobuladas y cubiertas de una pelusilla algodonosa en su cara inferior.
- La otra especie es el chopo negro (Populus nigra), de hojas simples como las del álamo temblón, pero de mayor tamaño. Su porte es elevado y majestuoso, lo que hace que se le prefiera como árbol ornamental. Una variante de esta última especie es el italiano, de silueta fusiforme (alargado y con los extremos más estrechos que el centro).
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