Poco a poco van aumentando las horas de luz aunque las temperaturas todavía no permiten grandes trabajos en el exterior. Hay que aprovechar las horas de más calor para preparar la tierra, iniciar la siembra (ya sea directamente o en semillero) y podar los árboles frutales.
Tareas a realizar
- Limpieza de las malas hierbas en los bancales.
- Continuar las labores de azada y organización de los bancales iniciadas el mes pasado. Al terminar pasaremos el rastrillo y alisaremos con el dorso y, si hay posibilidad de que llueva, cubriremos el suelo con unos plásticos.
- Abonaremos los cultivos plantados en otoño (guisantes, ajos, etc)
Invernaderos y túneles
- Deberemos aumentar el tiempo de aireación de los cultivos protegidos en invernaderos y túneles.
Siembra y trasplante
- Podemos iniciar la siembra de acelgas, lechugas, puerros, rábanos, etc en lugares protegidos (cajoneras, invernaderos o túneles).
- Si hace buen tiempo, hacia finales de mes pueden empezar a sembrarse hortalizas al aire libre, que podrán recolectarse en primavera o verano (guisántes, cebollas, espinacas, lechugas, etc). Si el tiempo es malo, habrá que aplazar la siembra y los trasplantes.
- Para acelerar la germinación podemos cubrir los bancales sembrados con una lámina de plástico.
El riego
- Los cultivos protegidos deben empezar a regarse con mayor frecuencia, ytilizando siempre agua a temperatura ambiente y de forma moderada.
Tratamientos fitosanitarios
- No es conveniente llevar a cabo aún ningún tipo de tratamiento, ya que en las ramas de los frutales puede haber insectos y ácaros útiles para la lucha natural contra arañas rojas, cochinillas, etc.
- Debemos airear los cultivos protegidos a fin de evitar el desarrollo de hongos.
La poda
- Comenzaremos la poda de arbustos y árboles frutales. Si el tiempo es muy frío conviene retrasar la poda hasta que mejore.
La cosecha
- Continuaremos la cosecha de hortalizas resistentes al frío (puerros, berzas, etc).
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